domingo, 19 de abril de 2015
Y digo yo que os preguntaréis por qué esta historia se llama Calcetines en agosto, verdad?...Pues bien,imaginaros que vivierais en un lugar donde siempre está nevando.Todos los dias del año nevando!En el lugar donde transcurre esta historia nunca sale el sol. Es ahí a donde os voy a llevar, ya que es el sitio donde vive Puu, una niña que todavía no he conocido en persona pero que tengo muchas ganas de conocer.
PUU Y SUS 50 PARES DE CALCETINES
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Puu era una niña de 5 años que vivía con su padre en la cumbre de una montaña.Todo el paisaje era blanco, blanco debido a la nieve. En la montaña donde vivían Puu y Nuka,( así es como se llamaba el padre de Puu) la nieve era tan abundante que no se lograban distingir bien los árboles, había miles de ellos alrededor de la casa de Puu y Nuka. Durante todo el año hacía bastante frío.
Puu no tenía recuerdos de su madre. Nuka le contó cuando Puu era tan solo un bebé que había nacido de un copo de nieve ya que su madre era un copo de nieve. Puu creyó la historia que su padre le contó y así nunca se sintió triste por la falta de su mamá.
Puu aprendió a hablar con la nieve, así que con el tiempo también aprendió a hablar con los pájaros, los zorros, las ardillas y hasta con las piedras, sí , Puu podía comunicarse con las piedras también.
La niña había crecido sin sol en esa montaña y nunca hacía calor, vamos que eso de ponerse en bañador o en biquini a tomar el sol en verano, Puu no lo había experimentado nunca.
Vivían en una cabaña muy grande,con un cuarto de estar muy amplio donde tenían instaladas dos buenas chimeneas, la mayor parte de los dias hacía tanto frio fuera de la casa que tenían que encender las dos chimeneas a la vez para poder estar calentitos. La casa tenía una cocina humilde justo con lo necesario, nada de microondas y nevera... no, no! calentaban la comida en un fuego de leña.También tenían un camping gas. La leche y los huevos los sacaban fuera de la cabaña, los colgaban de una rama de un árbol dentro de una bolsa, cerca de la puerta principal y así se mantenían frescos. La vida dentro de la casa era muy tranquila, Puu tenía su propia habitación con una ventana muy grande redonda orientada hacia el norte y Nuka tenía una habitación algo más pequeña orientada hacia el sur.
La cama de Puu era gigante. Nuka la había construido en previsión de que su hijita, todavía pequeña, fuera a crecer.
Dormía con unas 7 u 8 mantas de lana que la propia Senora Lana, una mujer anciana que vivía en la cima de otra montaña cercana, había tejido para la niña cuando era tan solo un bebé. Puu también dormía con dos pijamas puestos y tres pares de calcetines. Le gustaban mucho los calcetines, nunca antes he sabido de otra persona que tuviera tantos calcetines como ella tenía, 50 pares de calcetines! Sandalias para el verano no tenía ,eso es verdad, pero calcetines.... muchos! Muy variados y de muchos colores, se dice que tenía calcetines de colores que nunca nadie ha visto antes, tenía incluso calcetines que le llegaban hasta las orejas, esos eran los más grandes y fuertes para los dias o las noches de frio frio.
NUKA Y SU GLOBO TRANSPORTADOR
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Puu no iba a un colegio convencional, no le gustaba tener que estudiar asignaturas que no le interesaban, aunque todos los Lunes, Martes y Jueves visitaba a diferentes personas que vivían en diferentes montañas y cada uno de ellos le enseñaban cosas a Puu, ella atendía y escuchaba con los oidos y los ojos muy abiertos, estaba atenta con todos sus sentidos. Puu en poco tiempo, gracias a la Señora Lana, había aprendido a hacer ropa de muchos estilos diferentes. Sabía hacer chaquetas para personas despistadas o faldas, bufandas y gorros de diferentes colores, todos muy estilosos para las personas coquetas.
Puu también sabía jugar al parchís, al dominó y al poker, sabía jugar a muchos juegos diferentes.También estaba aprendiendo a cocinar, la Señora Cocotela le estaba enseñando a hacer tortilla de patatas y garbanzos a la cazuela. Puu sabía leer y escribir. Había aprendido también a saber orientarse en las montañas gracias a las nubes, las estrellas y al viento. Puu sabía hacer cosas que muchas personas no sabemos hacer. Nuka se sentía muy orgulloso de su hija.
El lugar donde Puu vivía estaba formado por 17 montañas enormes y en cada cumbre de cada una de las17 montañas vivía una persona importante y necesaria para todos los que allí vivían. Todos se necesitaban entre sí. Se dice que en una de esas montañas vivía un hombre que tenía 137 años, que había nacido ahí y que nunca, nunca había salido de la montaña. Este hombre, el Señor Ento, se comenta, que sabía escuchar al viento y entender qué es lo que el viento anunciaba. El señor Ento informaba de la dirección del viento todos los dias a Nuka, para que pudiera manejar su globo transportador. Cada uno de los habitantes de cada montaña tenía una labor que hacer en la vida para el bienestar de los demás.
Cientos de turistas elegian como destino viajar hasta allá para disfrutar de la particularidad del lugar.
Nuka era una de esas persona necesarias y particulares de esas 17 montañas. Tenía un globo en el cual cabían varias personas dentro de la cesta y éste se elevaba en el aire para poder transportarlas de un sitio a otro. Ese era el trabajo de Nuka, transportar a personas en su globo de colores. Era un trabajo algo duro porque algunos dias tenía que despertarse muy pronto por la mañana, incluso cuando todavía era de noche para empezar a trabajar, digamos que dependía del dia o del momento.Pero aun siendo duro, Nuka disfrutaba mucho de su trabajo porque le permitía ver el mundo y las montañas desde el cielo y eso le hacía sentir muy muy bien.
Un dia de Junio, Nuka no tuvo que ir a trabajar. No tenía que llevar a nadie a ningún sitio con su globo pero como era lunes, Puu quería ir a una de sus clases, la de ese lunes era una clase de papiroflexia, es decir, iba a aprender a hacer figuras con papel. Tenía que desplazarse unas 5 montañas más allá de la montaña donde ella vivía, estaba relativamente cerca pero Puu le pidió a su padre si ella sola podría dirigir el globo para ir a su clase...al fin y al cabo había aprendido a comprender el lenguaje del viento gracias a la ayuda del Señor Ento puesto que él le había enseñado a escuhar y comprender la dirección del viento. Puu era una niña muy valiente y cuidadosa y aun cuando tenía miedo se atrevía a atravesar a cada uno de sus miedos. Por eso Puu sabía hacer muchas cosas muy interesantes.
El globo de papá Nuka era muy grande y de muchos colores, pero incluso con todos los colores que tenía y lo divertido que parecía el globo a Puu le daba mucho respeto. Aun así fue a preguntarle a su padre si podía ir a su clase ella sola. Para ello tendría que montarse en el globo y una vez arriba en el aire intentar llegar a la casa de Don Piperino, su profesor de papiroflexia y amigo..
RELÁMPAGOS EN LA MONTAÑA NÚMERO 15
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Nuka observó dudoso a Puu por unos segundos ya que sabía bien que manejar el globo no era tarea fácil y que podría ser peligroso pero también era cierto que Puu conocía las diferentes clases de viento en la región y la temperatura del aire para poder hacer que el globo funcionara.Tenía que decidir y finalmente optó por confiar en su hija y todo lo que ella había aprendido. Así que la dejó ir.
Estaba empezando a amanecer cuando Puu se montó de un salto en el globo. Nuka se había dedicado durante la noche a inflarlo con aire caliente para poder elevarlo. Hacía mucho frio esa mañana y por supuesto el sol no aparecía para hacer su función de manta natural de calor, así que la pequeña Puu se puso 4 pares de calcetines, dos pares de medias, tres abrigos y un pañuelo bien grande sujetando su pelo y proporcionando calor a su cabecita, supongo que resultó ser algo incómodo para nuestra intrépida viajera el llevar tanta ropa puesta pero era la única manera de subir hasta las nubes dentro del globo y no pelarse de frio.
Nuka se despidió de Puu dándole un beso en la frente y acto seguido soltó la cuerda que mantenía el globo sujeto a tierra y un momento antes de que el globo comenzara a elevarse, le dijo: -Deja que tu intuición y el rey Maravillas te lleven a donde quieres ir.- .Puu miró muy atenta a su padre con el entrecejo fruncido ya que no entendía que le había querido decir al mencionar el rey Maravillas. Nunca antes había escuchado ese nombre. El globo se elevó con gran rapidez y entonces Puu preguntó a su padre: -Quien es el rey Maravillaaaaaaaas?- y Nuka contestó gritando ya que el globo estaba empezando a alejarse más y más..:-Lo sabrás a su debido momeeeeeeento!!!! Buen viaje mi amor!-
Allá arriba entre las nubes, la niña sentía más y más frio. Debía de estar muy atenta a todo lo que viera y sintiera. El aire se agitó más y más ,estaba algo revuelto, como de mal humor, la canasta del globo donde Puu se encontraba, oscilaba de un lado a otro por la fuerza del viento. De pronto una bandada de pájaros pasaron justo al lado de Puu, eran unos pájaros algo grandes y entonces uno de los pájaros preguntó:-Hacia dónde te diriges?- Hacia la montaña número 15 dirección Este -Respondió Puu. -Ten mucho cuidado porque se acerca una fuerte tormenta en esa dirección. Buena suerte!-Y dicho esto se fueron si decir ni pio. El globo se zarandeaba sin control y entonces nuestra protagonista empezó a tener algo de miedo. Las piernas le temblaban pero seguía calentando el aire del globo para subir más arriba. Sacó sus enormes prismáticos de uno de sus abrigos y allá a lo lejos, en dirección a la montana número 15 divisó las potentes destellos de unos relámpagos que acechaban la zona. Fue entonces cuando se puso su traje invisible de super valiente y siguió el curso del viento hacia la montaña número 15 dirección Este.
UN DESTINO SIN DESTINO
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Cerró los ojos, apretó los dientes y sin dudar dirigió el globo a toda potencia hacia la montaña número 15 dirección Este, justo allí donde se encontraba la tormenta. Asomó su cabecita fuera de la canasta del globo transportador, sus ojitos miraron hacia abajo pero apenas pudo distinguir nada que le ayudase a comprender dónde se encontraba. La tormenta comenzó a hacer su presencia y el globo se zarandeaba de tal manera que Puu tuvo que sujetarse fuertemente a él, los rayos estallaban a tan solo unos centimetros de la canasta. El cielo se oscureció más y más. Puu nunca había pasado tanto miedo en su vida.Ya le quedaba bien poco para llegar a la montana número 15 cuando....un sonido muy fuerte e impactante pudo escucharse y en unos segundos el globo transportador comenzó a perder altura. Un rayo había impactado en el globo y ahora éste perdía altura a gran velocidad perdiendo el control con Puu dentro de él.
El globo se precipitaba hacia la tierra a gran velocidad.
Puu comenzó a gritar con toda la potencia de sus pulmones: -Apuaaaaaaaaaaa! Apuaaaaaaa!- y justo cuando ya estaba a muy poca distancia de chocar contra el suelo... una bandada de unos 100 pájaros de diferentes tamaños, llegaron justo a tiempo y cada uno de ellos con su pico consiguieron sujetar la tela del globo por diferentes sitios y así volver a elevarlo. Puu se acurrucó sentada en la base de la canasta del globo transportador llorando a moco tendido de la emoción. Poco a poco se fue relajando ya que el peligro había pasado y sus amigos los pájaros habían acudido a socorrerla así que cantó una bella melodía con su suave voz en agradecimiento a sus amigos los pájaros. Era una canción que solo los pájaros podían entender y éstos agradecidos también siguieron batiendo sus alas en dirección Sur. Puu no sabía hacia dónde se dirigían pero lo que sí sabía es que podía confiar en ellos así que entre las nubes y conducida por una bandada de amigos con pico y alas siguió cantando.
Estaba empezando a anochecer, ya apenas sin luz, Puu empezaba a estar cansada y preocupada ya que Nuka seguramente estaría empezando a preguntarse dónde se encontría ella así que cerró los ojos e intentó mandarle con el pensamiento un mensaje tranquilizador a su padre, Puu utilizaba su mente para comunicarse con otros humanos. -Tranquilo papá, pronto estaré de vuelta contigo- . Pensó y al abrir de nuevo sus ojos y mirar al horizonte, muy a lo lejos....logró percibir algo que nunca antes había visto. Los pájaros la conducían exactamente hacia allí.
EL REY MARAVILLAS SE PRESENTA
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Lo que se divisaba allá a lo lejos era un pequeño espacio entre las nubes que en la lejanía aparentaba ser muy pequeño pero conforme se iban acercando ese agujero se hacía lentamente más y más grande, era una grieta en el cielo de una luminosidad enorme, de color amarillo muy intenso. A Puu le costó abrir los ojos debido a la intensidad de esa luz, así que los mantuvo cerrados. Empezó a sentir cómo su cuerpo comenzaba a inundarse de una sensación de calor, vamos... como si se hubiese puesto todos sus 50 pares de calcetines a la vez. Los pájaros seguian volando dirigiendo el globo. Puu cada vez se sentía más y más cómoda. Intentó abrir sus ojitos pero la luz era tan intensa que tan solo por un instante consiguó abrirlos con mucho esfuerzo y lo que vio le dejó con la boca abierta. Había un color azul intenso en el cielo que nunca antes vio! El cielo era azul !No era gris como ella había creído siempre -Desde cúando el cielo era azul?- Se preguntó y entonces una voz se abrió en el cielo y dijo: -Has esperado mucho mucho tiempo. Soy el Rey Maravillas y tú, tu globo y tus amigos los pájaros habeis venido, sois muy valientes. No os esperaba pero os doy la bienvenida.-Puu se quedó callada con sus ojos completamente abiertos y asomando una vez más su cabecita por la cesta del globo transportador pudo ver a lo lejos todo tipo de cosas!!Personas en biquini tumbadas en la arena al lado de una enorme cantidad de agua que parecía no tener fin! Personas en camisetas de tirantes paseando a sus perros en Jardines con flores de miles de colores diferentes entre arbustos y árboles con miles de hojas verdes de diferentes tipos de verdes!Chicos y chicas en bicicleta!De pronto Puu se dio cuenta de que había todo un mundo totalmente diferente de donde ella venía y este nuevo mundo que tenía delante de sus ojos era fantástico! Tenía colores por todos los lados!
Llevaban un buen rato sobrevolando ese lugar cuando de golpe y porrazo una nube gigante del tamaño de un gigante gigante...se apoderó del cielo y lo cubrió de color gris oscuro. De nuevo la voz que antes les había hablado, comenzó a decir: -Ahora ya sabes dónde encontrarme. Tengo forma de sol también, puedes contar conmigo pero ahora tienes que volver a casa. Nuka te está echando de menos y anda ya preocupado. Allí donde tú vives también estoy , en forma de montañas y nieve. Eres muy afortunada por poder comunicarte con los animales y entender el sonido y la velocidad del viento y aprender lo que te gusta al ritmo que a ti te gusta. Eres muy afortunada de tener personas extraordinarias cerca de ti que te enseñan cosas tan bonítas. La nieve que hay en las montañas donde vives te protege y el aire es muy limpio para que respires bien. Eres muy afortunada Puu! Te deseo un buen viaje de vuelta y quiero que sepas que cada vez que me necesites, allí estaré de diferentes formas para ti.-Dicho esto los pájaros giraron sin dudar en dirección Noroeste rumbo de vuelta a casa.
BUENAS NOCHES PUU...
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Los nuevos amigos de Puu que sostenían el globo transportador empezaban a estar cansados de tanto volar, llevaban ya horas volando. La casa de Puu sobre la cumbre de la montaña ya se divisaba y esto alentó a los pájaros a hacer el último esfuerzo mientras Puu les cantaba canciones. En un momento dado, Puu se quedó dormida y cuando despertó y abrió los ojos pudo ver que se encontraba solo a unos metros de su casa. Cuando ya la estaban sobrevolando los pájaros que habían adelgazado unos cuantos kilos por el esfuerzo realizado, soltaron de sus picos la tela del globo transportador que sostenían y lo dejaron caer la canasta sobre el tejado del hogar de Puu y Nuka.
Nuka que escuchó el estruendo debido a la caida el globo sobre el tejado salió en un pis pas a ver qué es lo que había ocurrido y Puu, sana y salva bajó hasta donde su padre se encontraba. Se dieron un abrazo larguísimo e intenso mientras los pájaros con la lengua fuera volaban en dirección Suroeste camino de sus nidos. Puu se despidió de ellos diciendoles: -Kamatala kamuuuu!!-Los pájaros respondieron con un sonido que solo Puu pudo entender.
Se metieron Puu y Nuka juntos en casa ya que el frio era poco acogedor. Puu se metió en su camita bien tapada con todas sus 7 mantas mientras le contaba a su padre toda su aventura y él escuchó la historia sentado a su lado hasta que Puu se quedó dormida. Nuka apagó la vela que Puu utilizaba para iluminar su habitación y con una sonrisa en los labios Nuka le susurró: -Buenas noches Puu..buenas noches mi niña valiente.- Nuka se sintió orgulloso de su hija y durante toda la noche reparó el globo transportador para que Puu pudiera ir al dia siguiente a su clase de pintura a la montaña número 12 dirección Oeste.
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